Jaz pincita último yo totalmente en bolas, Si me lo preguntas, ¿cómo será tu cara cuando le das un beso? ¡Pero espera un poco, te voy a folar A mí siempre me ha gustado el sexo, pero no antes de que él me rompiera mi culito. Por supuesto, tenía que cumplir todos mis deseos, así que ya que tenía que ser con ela, pues un beso negro y una gran folada anal. Al principio no pensé mucho, pero cuando vi la verga super dura del negro y su enorme culo, el placer fue indescriptible. De repente se puso a cuatro patas, y me dijo: ¿quieres que pare? Como la puta que era ela, dije que sí. Aquelo era más bien un sueño hecho realidad, mi coño estaba empapado con sus fluidos vaginales. Sin embargo, nada más tumbarme sobre su rabo, la penetré como toda una zora. Estoy seguro de que muchos tíos sueñan con poder corerse en alguna chica. Además