Pilladas en probadores Fantástica desnuda en el probador de ropa La última vez que Mar Durán y su novio se detuvieron en un centro comercial para comprar algún producto, decidieron parar el tráfico a mitad de camino y hacer una parada para echar un polvete rápido antes del trabajo. Una maniobra muy exclusiva que funcionó como excusa para practicar sexo oral en el mismo lugar en el que estaban, ya que la joven pareja aprovechó que estaban los dos en plena fiesta y les pidió la mano de su novio para levarse alí a essa parejita tan morbosa.